Se plantea la idea de que el tiempo establecido por nuestras propias mentes nos hará cambiar en algún momento cualquier situación actual. Tal vez se piensa que es real esa ilusión obstinadamente persistente a la que se quiere culpar de todo. Pero todo es un ciclo y no se logra identificar ni su principio, ni su fin. La mayoría de las cosas que se cuentan, son mentiras.
Mañana lo haré, siempre se dice eso. ¡Maldito año nuevo!, ¿Está bien? Porque eso pienso. Todo aquello de volver a empezar es una mierda. Todas esas promesas de la gente que va a cambiar también se pueden ir a la chingada. Y sé que suena mal, y sé que suena triste, pero soy realista. Y, ¿por qué cambiar algo solo porque es año nuevo? ¿Por qué no hacerlo cuando se veía sufrir a los demás por la maldita mediocridad propia y el egoísmo? ¿Por qué esperar tanto tiempo para hacer algo? Ahora solo existen excusas baratas, tonterías que se dicen para justificar una personalidad basura. Mañana nadie va a hacer nada. ¡Se hace hoy, maldita sea! Vivir el presente y dejar de joder.
Me encanta aferrarme a la esperanza de que todo cambiará, que todo mejorará, y apegarme a una pendeja fecha, porque así me enseñaron. Llegaré corriendo del trabajo a anotar cosas tristes en mi agenda, más cosas por hacer, y luego esperaré a que los que me rodeen lo noten porque lo subiré a mis redes sociales. Porque también soy una maldita. Como todos. Porque intento ser normal.
Así que, que se pudra esté año, y el que pasó y el que viene. Que se pudran todas las experiencias buenas y malas simplemente porque así quiero que sea. Quiero olvidar lo que comí ayer. Quiero olvidar al hombre con el que me acosté por dos años y olvidar que se acuesta con otras. Quiero olvidar que jamás me quiso. Quiero olvidar a mi perro que murió. Quiero olvidar las escuelas que dejé. Quiero olvidar que mi cerebro se ha convertido en una masa sin sentido y que mi cuerpo ahora solo sirve para que me jodan. Quiero olvidar el aroma de mi casa. Quiero olvidar los sabores que me encantan. Porque no tengo nada. Sólo tengo el presente. Y si me dicen que el presente, el pasado y el futuro nunca se separan, entonces todo es la misma basura pero repetida en ciclos. Dime, ¿qué mérito se tendrá?
Sólo quisiera dejar de esperar.