Lo anoto en una hoja, sólo es una persona. Estoy vuelta un puñado de nervios y lo único que hago es cerrar la conversación. Considero que también puede ser el efecto de la gran cantidad de comida que ingerí antes de dormir. El sueño no aparece y la adrenalina me consume. Me encuentro sentada en mi cama sin hacer nada; nadie me ataca ni me persigue pero tengo la sensación de que lucho por mi vida.
Sus mensajes llegan a mi celular sin tardanza. y me ponen a pensar más allá de lo acordado. Tengo miedo de que mis tonterías salgan y lo arruinen. Lo que me dice me trastorna y me cambia de a poco con cada palabra. Me siento loca, abolida. La cordura se fue volando, soltó mi cintura y no cesa de parpadear. ¿Qué es lo que haces?, ¿qué es lo que hiciste?, ¿por qué te abalanzas con tal fuerza sobre mi muro frágil de tristeza? Mueves el mundo y rompes cosas.
No te entiendo. Me dispersan tus ideas tan extremas. Eres tan misterioso o tan solo un mentiroso. ¿Qué es lo que tanto escondes con recelo? Despecho, comentarios sin consuelo. ¿Decifrarte podría?, ¿cómo y cuándo? Sería complicado.