Planeo un salto
alrededor de la cuna,
mansedumbre que pesa,
los pies se deslizan
en dirección contraria.
Es falso lo cierto,
la duda llana,
y tú como mis brazos
desamparados.
Avellanas
son tus ojos
en el ocaso,
me toca
correr al cielo,
lejos de mi entrada,
salto al vacío,
aparecen las cartas,
piso cada libro
y el corazón.